Residencias de los zares en las afueras de San Petersburgo
Es un espectáculo muy romántico que atrae no solamente a los turistas, sino también a los habitantes de la ciudad. Visita a la Venecia del Norte; la ciudad se ve muy bonita desde el agua, y los majestuosos palacios parecen aun más importantes y más bellos…
Petergoff
Una de las residencias veraniegas fundada por Pedro I. Pedro el Grande viajaba mucho a Europa y el Versalles francés le imprecionó tanto que el zar decidió a construir su propio palacio de verano y el parque con las fuentes en la costa del golfo de Finlandia. El sistema de las fuentes creado por los ingenieros rusos tiene el secreto que le dió al versalles ruso la posibilidad de superar el versalles francés.
Palacio de Catalina en Pushkin
El Palacio de Pushkin o el Palacio de Catalina era la residencia de verano de los zares en Rusia. Su estilo es rococó y está situado en la ciudad de Pushkin. El palacio está considerado como patrimonio de la humanidad dentro del epígrafe “Centro Histórico de San Petersburgo y conjuntos monumentales anexos”. Este palacio está a tan solo 25 km de la ciudad de San Petersburgo. Está formado por un complejo de varios palacios y parques de la ciudad que da su nombre, Pushkin.
Palacio de Pavlovsk
El Palacio de Pávlovsk es uno de los museos de Rusia que antes había sido residencia de la familia imperial. Está ubicado en la ciudad de Pávlovsk y es un sitio repleto de belleza, no en vano está considerado como Patrimonio de la humanidad dentro del epígrafe “Centro histórico de San Petersburgo y conjuntos monumentales anexos”.
Kronstadt
Es una isla fortificada, un puerto y una base naval, que durante la época soviética estuvo cerrada a los extranjeros. En este pueblo de cañones, anclas y memoriales de marineros hasta las iglesias pertenecían al Ministerio de Asuntos Marítimos. El templo más bonito de la ista es la Catedral Naval de San Nicolás. En los días claros su reluciente cúpula es visible desde San Petersburgo y la campana también se oye desde muy lejos. El Fuerte de Alexander I es quizá menos espectacular pero también es un lugar fascinante. Era un laboratorio para estudiar la plaga que solo era accesible en barca.
Gatchina
Durante el reinado de la emperatriz Catalina II, su hijo Pablo I hacia de zar en Gatchina. Comandaba una armada de juguete que tenía uniformes prusianos y les daba conmemoraciones ficticias a sus soldados por sus actuaciones.
La principal atracción es el Palacio de Gatchina, con su plaza para desfiles en frente, así como el Parque del Palacio, con su puente encorvado donde queda alguna de las ruinas en las que Pablo organizaba sus "encuentros de caballeros".
Pablo estaba interesado en el misticismo en los caballeros medievales así que poco después de ser proclamado zar dio cobijo a los Caballeros de la Orden de Malta, una fuerza militar católica que había sufrido en manos de Napoleón. El mandatario ruso fue elegido Gran Maestre de la Orden y levanto el Palacio Priori en Gatchina.